DIAMANTES, FLORES Y ESPADAS

(Madrid,15 de junio de 2016)China tiene ambición de crecer al precio que sea. Incorporará los vicios de la modernidad, pero la salvarán las Flores. Incorporará los pecados de la globalización, pero le salvarán las Artes. Incorporará el escepticismo de los resultados, pero le salvarán las Ingenuidades. Es importante recordar que China es el país de las Artes Marciales y el país de las Artes Espirituales del equilibrio. El movimiento, la armonía, el espíritu y la relajación renuevan a las personas. 

Europa –dentro de poco– no podrá competir con China, porque China tiene los Diamantes, que son las Fuerzas, porque China tiene las Flores, que son las Artes, y porque China tiene las Espaldas que son las Armas. Y así –por fin– después de trabajárselo mucho –dentro de unos cuantos años– Europa será más historia que futuro. 

El desplazamiento a China de un sinfín de actividades –originado por el atractivo de la mano de obra barata– está siendo un espectacular mecanismo de creación de empleo, que está originando un desplazamiento de la población Agrícola hacia la Industria instalada en las ciudades, proceso visible en todos los casos de desarrollo exitoso. 

Este crecimiento del abastecimiento de mano de obra a la Industria y a los Servicios está originando un crecimiento no previsto de la demanda mundial de materias primas, materiales y productos, con el consiguiente encarecimiento de sus precios, y traerá la consecuencia de un futuro crecimiento de la oferta de productos acabados a precios atractivos, que pondrá en riesgo el mantenimiento de algunas economías occidentales que no saldrán cómo reaccionar ante este fenómeno que romperá las reglas tradicionales de los mercados. 

China se lo va a poner duro a la Unión Europea. Más duro que a otras economías más resistentes. En el peor de los casos –que no es imposible– la Unión Europea puede ser la gran víctima de China.

José Luis Méler y de Ugarte

Ex-presidente