• CEOMA pide un protocolo especial para adultos mayores en casos de catástrofes climáticas
  • La Confederación Española de Organizaciones de Mayores (Ceoma) se declaró “en emergencia climática” este jueves, ante la proximidad de las primeras olas de calor, previstas para dentro de seis semanas, y solicitó planes especiales, dado que el 75% de los que fallecen en ellas son mayores de 65 años.

CONCLUSIONES

Son las conclusiones principales del acto precongreso ‘Los retos de la emergencia climática para el envejecimiento, la vida y el futuro’, enmarcado dentro del próximo ‘XI Congreso Nacional de Organizaciones de Mayores’ y que reunirá en Barcelona los próximos días 20 y 21 de abril a los sectores interesados en las personas mayores.

En la imagen Sabina Camacho Calderón, Presidenta de CEOMA

Desde CEOMA se exige, además, que se ponga en marcha un protocolo de alerta especial y un plan de acción específico para adultos mayores en relación con las emergencias y catástrofes climáticas.

“Pedimos un sistema operativo de alerta temprana en el que se emita la información en tiempo real, como en Estados Unidos, ante fenómenos excepcionales de meteorología, y que se cree un protocolo de respuesta inmediata una vez declarada la alerta temprana, similar a la que se creó en 2005 ante la ola de calor acaecida Estados Unidos”, subrayó Eduardo Rodríguez Rovira, presidente de la Comisión de Asuntos Internacionales de CEOMA.

Además, desde CEOMA se insta al resto de ONG y asociaciones de mayores a que se sumen a estas acciones para proteger a las personas mayores y vulnerables contra las emergencias climáticas.

 

PLAN DE ENVEJECIMIENTO 2030

“Necesitamos un plan estratégico de envejecimiento para 2030 y queremos presionar a la sociedad y a los gobiernos para que se pongan en marcha las medidas establecidas en el Acuerdo de París de 2015”, remachó Rodríguez Rovira.

Como afirmó Sabina Camacho, presidenta de CEOMA, las ola e islas de calor y frío, además de las epidemias y contaminación, son una realidad cotidiana. “Nadie puede negar los daños de fragilidad y discapacidad relacionada con la emergencia climática, ya que el 75% de las víctimas son adultos mayores de 65 años». Agregó que «no existen legislaciones especiales sobre las personas mayores y discapacidad en relación con el cambio climático y se necesitan proyectos específicos”.

Un gran problema es que, según Carlos Ferreyra, presidente de la Alianza del Clima, Vida y Salud Internacional y vocal de la Comisión de Asuntos Internacionales de CEOMA, dentro de las ciudades existen zonas que no tienen ni un solo mecanismo para luchar contra el recalentamiento en caso de la de calor.

Por ello, denunció que «hay 30 puntos de Madrid que no absorben el calor, con temperaturas que superan la media de lo que nos presenta la Agencia Española de Meteorología (Aemet)”.

Además, recordó que en esas zonas viven personas muy pobres o adultos mayores, que normalmente están solos, pero que en ciudades como San Francisco y Los Ángeles reciben ayuda porque existen planes para contra las olas e islas de calor.

Por ello, propone recuperar las zonas más cálidas «con vegetación para refrescarlas o aplicando pintura especial contra el calor», además de capacitar a las personas para que puedan medir el calor e incorporar mecanismos tecnológicos para hacer bajar la temperatura.

“Si la temperatura de la noche en esta isla de calor que hay en tu domicilio no baja y hasta puede crecer, esa casa es un horno que te puede llevar a la muerte», concluyó.

A este encuentro asistieron, además, de forma virtual, la directora de Salud Pública y Medio Ambiente de la OMS, María Neira; el ex director general de la Unesco Federico Mayor Zaragoza; y de forma presencial el ex subsecretario del Ministerio de Sanidad Carlos Hernández Gil.

(SERVIMEDIA)
16 MAR 2023
CAG/clc