DIAMANTES, FLORES Y ESPADAS

(Madrid, 8 de junio de 2016) China está haciendo de la libertad un arma para el crecimiento ordenado de la sociedad –una vez aprendida la lección de la experiencia europea– que ha hecho de la libertad un arma de ventaja para los que no respetan la de los demás, para los “nacionalistas/separatistas” que no quieren cooperar, para los inmigrantes que no se quieren integrar, para los especuladores que no quieren trabajar y para los políticos que no quieren representar y que se aprovechan de un sistema que no ha encontrado la manera de respetar la libertad.

Por eso China ganará a Europa y por eso Europa perderá. El país de las Artes Marciales ha encontrado la manera de convertir lo que Europa creía que eran sus fortalezas en la razón de sus debilidades y en el carcoma de su podio.

Y ahora ese pueblo está saliendo de su túnel “comunista” y se está sumergiendo –de cuerpo entero– en la red de autopistas de la Globalización. Con sus Fuerzas, con sus Artes y con sus Armas. La tradición y la falta de fe en la Política son sus fuerzas. La Naturaleza, las Plantas y las Flores son sus Artes. La Inteligencia, la Ambición y la Capacidad de Trabajo son sus Armas.

Diamantes, Flores y Espadas componen el elixir maravilloso que está haciendo de China el trampolín del progreso. China no cree en la Política, pero cree en la Naturaleza, en la Tierra y en las Flores. Por eso, cuando el mundo occidental se pone de rodillas ante el Islam, China lo mira de frente y no mueve una pestaña ni deja de sonreír.

Donde hay Flores, hay Arte. Donde hay Arte, hay Imaginación. Donde hay Imaginación, hay Ambición. Y donde hay Ambición, hay Ganadores contra los Perdedores sin ambición.

José Luis Méler y de Ugarte

Ex-presidente